IMPORTANCIA DEL JUEGO LIBRE EN LA PRIMERA INFANCIA

 

¿Cuál será la práctica más apropiada para despertar en los niños la creatividad y hacer que sea feliz?

Sabemos que existen innumerables prácticas que facilitan este proceso en los niños de nuestra época, pero jugar libremente es sin duda la más importante opción y debe ser su actividad principal. Consiste en jugar con su cuerpo, con juguetes, manipular objetos, poder moverse guiados por su propio instinto y por su curiosidad, sin reglas, sin límites ni rigideces. Jugar de este modo es aprender, pues a través del juego, el niño comprende el mundo y se comprende a sí mismo. este juego debe ser espontáneo surgido a partir de su propia iniciativa, no dirigido por el adulto. Esto no quiere decir que el niño deba jugar solo, por el contrario, la vigilancia y compañía de los padres es necesaria, pero sin agobios, sin directrices y a su ritmo, de esta manera se les proporciona un apoyo emocional fundamental para su desarrollo. 

El juego en la infancia no es sólo entretenimiento, es aprendizaje. Al jugar con otros, construyen su propia identidad, aprenden a relacionarse entre ellos mismos y su entorno, escogen con qué jugar, dónde jugar y organizan sus tiempos, lo cual contribuye al desarrollo de una conducta social positiva y al estímulo permanente de la creatividad.

El juego libre también puede ser individual, en el que el niño escoge libremente hacer algo de acuerdo a sus necesidades internas. Da rienda suelta a la imaginación y arma sus propios proyectos de juego, asumiendo sus decisiones y fortaleciendo su autoestima.

Si nos preguntamos por qué juegan los niños, la respuesta es porque los hace felices. El juego es y debe ser una actividad placentera en sí misma. No lo hacen porque deban, ni por una recompensa, sino porque quieren. Para los niños, jugar es gratificante pues libera su capacidad creadora sin ataduras.

La invitación es acompañar este proceso tan importante en niños y niñas, generando espacios de calidad, donde se pueda aprovechar cada momento de su niñez, en busca de potenciar algunas habilidades que son innatas pero se pueden afianzar a través del juego libre. 

Elaborado: Lic. Mónica Susana García -  Maestra de Preescolar